La próxima generación de alimentos proteínicos inteligentes
El proyecto Smart Protein busca desarrollar la próxima generación de alimentos proteicos inteligentes que sean rentables, eficientes en el uso de recursos y nutritivos.
Las proteínas se extraerán de las plantas y mediante el ciclo ascendente de los alimentos de desecho, como los residuos de pasta o la corteza del pan. Estas proteínas inteligentes se utilizarán para crear ingredientes y productos que sean nutritivos, confiables, respetuosos con el medio ambiente y que formen parte de una cadena de suministro segura y preparada para el futuro.
Los productos e ingredientes potenciales podrían incluir nuevas formas de carne, pescado, mariscos y productos horneados de origen vegetal, así como queso y otros productos lácteos procedentes del mundo vegetal.
El proyecto es una asociación entre más de 30 socios externos, incluidas universidades, instituciones de investigación, corporaciones, pymes y ONG.
Los objetivos de Smart Protein
El proyecto Smart Protein tiene unos objetivos muy concretos que son:
- Comprender la idoneidad, la rentabilidad y los rendimientos potenciales de la quinoa, las habas, las lentejas y los garbanzos cultivados en diferentes regiones de Europa. Todos los cultivos utilizarán un enfoque orgánico y regenerativo de la agricultura.
- Desarrollar aislados y concentrados de proteínas que actualmente no están disponibles en el mercado mediante un proceso de fraccionamiento de los cultivos cultivados. Estos se pueden utilizar para el procesamiento de proteínas en seco y húmedo.
- Producir biomasa fúngica y fracciones de proteínas derivadas a partir de salvado de trigo, residuos de pasta, costras de pan y raicillas de levadura y malta.
- Producir tortas de micelio comestible y hongos mediante fermentación en estado sólido, utilizando residuos de extracción de proteínas vegetales y corrientes de desperdicio de alimentos de las industrias de molienda, pasta, panadería y cervecería como medio de crecimiento.
- Identificar las características únicas de las proteínas generadas, determinando las aplicaciones de alimentos y bebidas más innovadoras para cada fuente de proteína, incluida la calidad nutricional, el valor biológico, las propiedades sensoriales y tecno-funcionales, la estructura de la proteína y la interacción proteína-proteína.
- Validar y allanar el camino para la posterior comercialización de productos alimenticios objetivo, incluidas alternativas de queso y yogur, alternativas de carne y mariscos, productos de panadería y pastas, salsas, alimentos infantiles y bebidas deportivas.
- Abordar los aspectos regulatorios, de seguridad alimentaria, alergenicidad y sostenibilidad de los ingredientes y productos alimenticios alternativos desarrollados, a lo largo de la cadena de valor alimentaria.
- Evaluar la viabilidad comercial de estas nuevas fuentes de proteínas mediante el desarrollo de casos comerciales, que pueden ayudar a estimular la transición a proteínas alternativas e impulsar la aceptación entre los consumidores.
- Investigar la aceptación y la confianza de los consumidores en diferentes mercados hacia los productos innovadores a base de plantas creados con Smart Proteins.
- Desarrollar la especialización mutua en extracción y funcionalización de proteínas entre los participantes de Smart Protein, demostrando el uso de la tecnología en un entorno industrial.
- Comunicar con éxito los resultados del proyecto a las audiencias objetivo, ayudando así a amplificar el impacto a largo plazo del proyecto.
El sector agroalimentario debe ser más rentable, eficiente en el uso de los recursos y nutritivo para satisfacer las necesidades de la sociedad actual. Un ambicioso proyecto de 10 millones de euros está investigando el potencial de fuentes alternativas de proteínas, que podrían utilizarse para crear ingredientes y productos a base de plantas.
«Los desafíos clave de sostenibilidad que enfrenta la industria agroalimentaria incluyen mejorar la eficiencia de la producción primaria sin comprometer nuestro frágil sistema ecológico. Existe la necesidad de producir más y mejor con menos, y de reformar el entorno alimentario en el que los ciudadanos se involucran con el sistema alimentario.»
Dr. Emanuele Zannini, coordinador del proyecto Smart Protein, de la Facultad de Ciencias Alimentarias y Nutricionales del University College Cork.
El proyecto Smart Protein, financiado con fondos europeos, se lanzó en enero de 2020 para desarrollar la próxima generación de alimentos nutritivos, rentables y eficientes en el uso de los recursos.
Los socios de Smart Protein
El proyecto Smart Protein consiste en un consorcio diverso con 33 instituciones asociadas de 22 países que comprenden fitomejoradores, redes agrícolas, productores de ingredientes alimentarios y fabricantes de productos. Además de los socios principales, la Stakeholder Advisory Board está estratégicamente posicionada para asesorar sobre cada proyecto durante su ejecución.
Editorial Cultura Vegana
www.culturavegana.com
NOTAS BIBLIOGRÁFICAS
1- Web del Proyecto Smart Protein
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