«He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo»
Juan 1,29
Cordero de Dios en griego antiguo es Ἀμνὸς τοῦ Θεοῦ, Amnos tou Theou y en latín es Agnus Dei, se refiere a Jesús que aparece en el Evangelio de Juan.
La doctrina cristiana sostiene que el Hijo de Dios, Jesucristo, escogió sufrir la crucifixión en el Calvario como un signo de su total obediencia a la voluntad de su divino Padre. En la teología cristiana, el Cordero de Dios se considera fundamental e integral para el mensaje del cristianismo.
«He venido para abolir los sacrificios, y si no cesáis de sacrificar, la ira de Dios tampoco os dejará.»
Palabras de Jesús, cit. por Epifanio, Panarion 3,16
La metáfora del Cordero Pascual también aparece en Salmos 23, que representa a Dios como un pastor que conduce a su rebaño refiriéndose a la humanidad. También lo mencionan en el Antiguo Testamento los profetas Isaías y Jeremías, quienes anuncian la llegada de un servidor de Dios dulce como un cordero.
Cuando hace aproximadamente 1600 años Jerónimo realizó la primera traducción completa al latín de la Biblia por encargo del Papa, estuvo bajo la gran presión del poder eclesiástico y de las fuerzas políticas que estaban surgiendo. Temas como la reencarnación, la ley de siembra y cosecha y las enseñanzas del Nazareno acerca de una relación pacífica de los hombres con los animales, no encontraron ningún lugar en la Biblia eclesiástica. Que Jerónimo conocía bien el amor de Jesús por los animales, lo demuestra claramente su cita:
«El placer por la carne era desconocido hasta el diluvio universal; pero desde el diluvio se nos han embutido las fibras y los jugos pestilentes de la carne animal. […] Jesucristo, que apareció cuando se cumplió el tiempo, volvió a unir el final con el principio, de manera que ya no nos está permitido comer más carne.»
Jerónimo [331 – 420] · Adversus Jovinanum 1,30
Qué es un cordero lechal?
Se denomina cordero lechal al que se sacrifica en los primeros 25 o 30 días de vida. Suelen tener un peso vivo de entre 10 y 12 kilogramos, y unos 5 ó 6 por canal. Debido a su alimentación (casi exclusivamente a base de leche) puede tener hasta un 9% de grasa.
El lechazo auténtico no debe superar los 30 días de vida y pesar entre 9 y 12 kg para mantener un sabor suave y una textura y jugosidad inigualables. Es, por tanto, el cordero más apreciado por los que no pueden renunciar al gusto, a la tradición, al hábito o la conveniencia de subcontratar a un carnicero para que mate al animal. Su elevado precio en temporada de Navidad es proporcional a los remordimientos de conciencia que experimentan quienes, encargan, cocinan y comen cordero para celebrar el nacimiento de Jesús.
Los corderos lechal son corderitos alimentados fundamentalmente de leche y no superan el mes y medio de vida. Son canales de menos de 9 kg de peso. La canal es el cuerpo de animal de abastos desprovisto de la totalidad de las vísceras torácicas y abdominales excepto el riñón. Puede incluir o no las cabezas o las patas. Estas canales proceden principalmente de razas cuya producción principal es la leche utilizada para la fabricación de queso de oveja.
El cordero recental tiene menos de 4 meses de vida, destetados que pasan a comer piensos. Suelen ser de razas autóctonas (como por ejemplo la raza Merina en España). Las canales son de peso inferior a 14 kg o 16 kg. En este caso, la carne ya va adquiriendo un poquito más de personalidad, es de color rosado, muy tierna y con el justo nivel de grasa. Este tipo de cordero es el más consumido en España.
El cordero Pascual tiene entre 6 meses y un año. Además de completar su lactancia, también suele pastar y tomar algún tipo de concentrado. Son canales mayores de 16 kg de peso. Son más grasa y el color de la carne más roja. Suelen ser de razas extranjeras y producidas en otros países. En España por su fuerte sabor y engrasamiento no es el cordero mejor aceptado.
Lechazo Churro IGP
Es la máxima calidad. El más «alto de gama«. Su edad media es de 22 días, que ha vivido, en su totalidad, alimentado exclusivamente de la leche materna. Su peso en canal puede oscilar entre los 5,5 Kgs y los 6 Kgs limpio sin cabeza ni asadurilla. Se caracteriza por tener una carne blanca rosada o nacarada.
Desde su nacimiento, está sometido a los dictámenes y controles que marca la IGP, su Reglamento y su Consejo Regulador. El sello IGP Indicación Geográfica Protegida, es la garantía de cualquier producto sometido a una Denominación de Origen.
«Tanto asado en cuartos, como sus Chuletillas, Paletillas, Piernas, Riñones o Mollejas, proporcionan un auténtico placer al gourmet más exigente. Cualquiera de sus partes constituye una auténtica delicatesen.»
Es el producto idóneo para los amantes de lo exclusivo, para los verdaderos gourmets de lo exquisito, para los amantes del buen comer y para los paladares más expertos. Por las propias normas de la IGP, el Lechazo IGP tan sólo se oferta fresco, nunca puede ser congelado.
Lechazo Churro Fresco
Se trata de un Lechazo Churro auténtico. La diferencia con el IGP es que no está sometido a los controles de la IGP. Al no someterse a los controles de la IGP y conseguirlo directamente de origen a través del propio ganadero, puede llegar al mercado a un precio sensiblemente más bajo. Sus características son las mismas del IGP y de éste procede todo su despiece, dado que la IGP no admite el despiece de su Lechazo Certificado.
El espíritu de Navidad y Pascua
¿No está escrito en los profetas?: ¡cesad vuestros sacrificios de sangre y vuestros holocaustos! Dejad de comer carne, pues no hablé de ello a vuestros padres ni se lo ordené, cuando les saqué de Egipto. En cambio, esto les ordené:
Obedeced Mi voz y andad por los caminos que os he mandado y seguiréis siendo Mi pueblo y os irá bien. Pero ellos no estaban dispuestos y no obedecieron.
Y qué os ordena el eterno sino que practiquéis la justicia y la misericordia y andéis humildemente con vuestro Dios? ¿No está escrito que al principio Dios determinó los frutos de los árboles, las semillas y las hierbas para alimento?
Pero ellos han convertido la casa de orar en una casa de ladrones y, en vez de hacer una ofrenda pura con incienso, han manchado mis altares con sangre y comido la carne de los animales sacrificados.
Pero Yo os digo: no derraméis sangre inocente ni comáis carne. Sed rectos, amad la misericordia y haced justicia, y vuestros días perdurarán largamente en la tierra que habitéis. [Cap. 33]
Y para tu sustento: ¡contempla los campos, cómo crecen y son fértiles, y los árboles que dan fruto y las hierbas! ¿Qué más quieres que lo que te da el honesto trabajo de tus manos? ¡Ay de los fuertes que hagan mal uso de su fuerza! ¡Ay del astuto que dañe a las criaturas de Dios! ¡Ay de los cazadores!, pues ellos mismos serán cazados.
Por qué comes cordero el día de Pascua y por Navidad?
Al lector de la Biblia se le hace creer en numerosas páginas sobre Moisés, que Dios quería que los animales fueran torturados y sacrificados para complacerle. Estos textos fueron tan habilidosamente manipulados, que los creyentes tenían que creer que Dios era un ser perverso, brutal, carente de amor e iracundo, que se alegraba de la matanza brutal y sin sentido de los animales.
Debes saber que esta costilla de cordero lechal asada al horno es hijo de una madre, degollado después de 25-30 días de su nacimiento. Una criatura de Dios tan inocente que seguimos usando para venerar la superstición que sacrificarla y comerla expía alguno de tus pecados.
Quién crea que esto es la palabra de Dios, como lo pretende una de las grandes instituciones, cae en la trampa del oscurecimiento de la verdad. Sin embargo, quien lea exactamente a los profetas, encontrará incluso en la Biblia no pocas palabras verdaderas de Dios que escaparon claramente a los “correctores“ y falsificadores de los escritos:
«Quien inmola a un toro es como quien mata a un hombre; quien sacrifica a una oveja es como si estrangula a un perro; quien presenta víctimas para alimento es como el que ofrece sangre de cerdo; quien quema incienso es como si ensalza a un ídolo. Estas cosas eligen en sus caminos y sus almas se complacen en sus abominaciones.»
Isaías 66:3
El Nuevo Testamento es una creación humana, una recopilación de textos, de cuya compilación resultaron las Sagradas Escrituras por decreto eclesiástico. Muchas principios morales que habrían de haber sido sagrados no se incluyeron en ellas por intereses materiales. Mucho de lo que enseñó Jesús de Nazaret ha permanecido oculto en escritos apócrifos y no fue recogido en los escritos que hoy nos son presentados como Evangelio oficial.
«No te juntes con los borrachos de vino, ni con quienes se deleitan en el consumo de la carne.»
Proverbios 23, 20
Feliz Pascua y feliz Navidad!
Editorial Cultura Vegana
www.culturavegana.com
NOTAS BIBLIOGRÁFICAS
1- wikipedia.org/Cordero_de_Dios
2- culturavegana.com, «La Pascua infernal», Editorial Cultura Vegana,
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